Un empate luchado

Previo al inicio del partido parecía todo perfecto. En Rosario, luego de una tarde lluviosa, el aguacero había parado y la noche se mostraba despejada. Fresco, ideal para jugar y disfrutar. Aunque no todo resultó como uno deseaba. Las Leonas salieron a la cancha a enfrentar a Corea de Sur, pero debieron sufrir la embestida rival, hasta lograr un empate en 2 faltando dos minutos para que sonara la chicharra. Afortunadamente, a base de gran esfuerzo y despliegue físico, la paridad llegó, nada más y nada menos, que desde el palo de la mejor jugadora del mundo.

Esta vez no fue fácil para Las Leonas. Luego de medirse durante los primeros 5 minutos, en un partido muy físico, las coreanas salieron a atacar a las locales. Tanto así que fueron las primeras en generar situaciones de riesgo en el área contraria. La mala puntería, por un lado, y una excelente atajada de Belén Succi (se lo perdió Darae Kim),por el otro, habían salvado a Las Leonas de comenzar abajo en el marcador. “A la zona”, gritaba el Chapa Retegui desde el banco a sus defensoras, tratando de acomodar las desatenciones en el fondo y las marcas que quedaban libres cerca del area.

Así, más rápidas en sus ataques, abriendo mejor la cancha y defendiendo luego con sus once jugadoras, las asiáticas consiguieron vencer la valla argentina a los 20’, a través de una arrastrada de Seonok Lee en un córner corto. Fue un 1 a 0 que duró poco, ya que despertó a Las Leonas. Sólo un minuto más tarde las locales se repondrían rápido de ese golpe. Por la misma vía, Noe Barrionuevo igualaba las cosas. Y, aunque en esta mitad Corea fue quien tuvo las oportunidades de gol más claras (llegadas libres y un corto con acertada respuesta de Succi), no pudo herir a su rival. El descanso venía bien para poner paño frío y reanudar el complemento con la mente fría pero con el corazón bien caliente. Había que reacomodarse.

En el segundo tramo, en un cotejo que demandaba un increíble despliegue físico, Argentina salió parada un poco atrás, tratando de bajar el ritmo a las coreanas. Las oportunidades fueron parejas para ambas. Tanto las asiáticas como las argentinas contaron con chances de gol (Lucha y Merino lo tuvieron en sus palos). Pero fueron, una vez más, las de camiseta roja las que consiguieron ponerse al frente, faltando sólo 4 minutos para el final (otra vez, Lee hacía sonar la tabla con su arrastrada).

Con poco tiempo restante, con las últimas fuerzas y con la garra característica, lejos de darse por vencidas, Las Leonas salieron en busca del empate tan deseado. A los 33, Maca Rodríguez penetró al área y consiguió la falta. Córner corto. Y allí apareció la mejor jugadora del mundo para gritar su primer gol en el torneo. Tiro de Silvina D’Elía, rebote tomado por Lucha y sablazo cruzado contra la red. Explotaron las gargantas dentro y fuera de la cancha, las emociones estaban a flor de piel. Fue 2 a 2. Y, ahora, a pensar en China.

Formaciones:
Argentina: Belén Succi; Florencia Habif, Silvina D´Elía, Mariela Scarone, Noel Barrionuevo; Macarena Rodríguez; Josefian Sruoga, Luciana Aymar, Rosario Luchetti; Delfina Merino, Carla Rebecchi. Ingresaron: Martina Cavallero, Rocío Sánchez Moccia, Daniela Sruoga, Sofía Maccari. Entrenador Carlos Retegui.

Corea del Sur: Younghui Moon; Eunji Cho, Seonmi Park, Seonok Lee ©, Yu Mi Jeon; Sung-Hee Gim, Youngran Kim, Okju Kim; Darae Kim, Jongeun Kim, Jonghee Kim. Ingresaron: Mihyun Park, Eunbi Cheon, Kiju Park, Hye Lyoung Han. Entrenador: Jung Woo Lim.
Árbitros: Frances Block (GBR) y Carol Metchette (IRL)

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