Chau, Corea

De a poco los grupos se empiezan a definir. Desde afuera el plantel inglés miraba expectante lo que pasaba dentro de la cancha. Su destino dependía, en parte, de lo que ocurriría en el choque entre España y Corea. Y el resultado les sentó muy bien a las inglesas porque las coreanas no supieron encontrarle la vuelta al partido para superar a España en el marcador. 2 a 2, un resultado que sin dudas no dejó contentas a las asiáticas. Se quedaron sin clasificación.
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Al conjunto de Pablo Usoz no se le caían las ideas. No obstante Corea no lo supo aprovechar. En general, daba la sensación de que el equipo de Kang ponía todo de sí, pero careció del temperamento que se necesitaba para ganar. Así y todo, a los 7, las asiáticas convirtieron de la mano de Bo-Mi Kim, quien con todo el tiempo del mundo capitalizó un mano a mano, fusilando a la arquera.
El partido era parejo. Las españolas iban para adelante con poca idea y Corea respondía con un gran despliegue físico. Y con gran esfuerzo España marcó el primero (Gloria Comerma con un disparo liso y rasante de corner corto), aunque no le alcanzó porque a tan solo segundos de irse al descanso las asiáticas, de la mano de Seul Ki Cheon, volvió a imponerse.
Las emociones estaban a flor de piel. Las chicas de Kang se jugaban todo. Tantas idas y vueltas hacían difícil manejar la ansiedad. Sobre todo cuando a 3 minutos de iniciada la segunda mitad Muñoz hizo sonar la tabla. Gol muy gritado por los miles de presentes que apoyaban simpáticamente a España. Dos a dos, una igualdad que no se pudo romper más. Como el enfrentamiento se estancó en una meseta, el público también se durmió. Y así fue como Corea perdió toda posibilidad de clasificar.

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